Irán lanzó este lunes una serie de misiles balísticos dirigidos hacia la base aérea Al‑Udeid, en Qatar, en lo que denominó una respuesta a los ataques estadounidenses del domingo contra instalaciones nucleares en su territorio. La acción fue anunciada por medios estatales iraníes como una “respuesta exitosa y poderosa”, aunque hasta el momento no existen reportes oficiales que confirmen daños materiales o víctimas en suelo qatarí.
El gobierno de Qatar, a través de un comunicado de su Ministerio de Relaciones Exteriores, informó que sus sistemas de defensa interceptaron los proyectiles antes de que alcanzaran su objetivo. “Ninguna persona resultó herida y no hay daños estructurales reportados”, indicó la declaración. La base de Al‑Udeid alberga a aproximadamente 10.000 tropas estadounidenses y es considerada una de las principales plataformas operativas del Pentágono en Medio Oriente.
El Departamento de Estado de Estados Unidos aún no ha emitido un parte oficial sobre las consecuencias del ataque. No obstante, la embajada estadounidense en Doha activó una alerta de seguridad para sus ciudadanos, instándolos a permanecer en sus lugares de residencia y seguir las instrucciones de las autoridades locales. La alerta fue emitida pocas horas después de que residentes reportaran explosiones y el despliegue de sistemas antiaéreos sobre el cielo de la capital qatarí.
Este incidente ocurre en un contexto de alta tensión regional. La ofensiva de Estados Unidos e Israel del domingo, que incluyó el uso de bombas perforadoras contra al menos tres sitios nucleares iraníes, ha sido calificada por Teherán como una amenaza directa a su seguridad nacional. En su comunicado oficial, Irán aseguró que su acción se enmarca en el “derecho a la defensa legítima”.
Hasta el cierre de esta nota, ni el Pentágono ni Naciones Unidas habían emitido pronunciamientos sobre el incidente. Voceros de la Unión Europea y del gobierno británico expresaron preocupación por una posible escalada del conflicto, mientras analistas alertan sobre el riesgo de nuevos ataques o represalias en el Golfo Pérsico, especialmente en torno al Estrecho de Ormuz, una zona clave para el tránsito energético global.
Aunque el lanzamiento de misiles ha sido confirmado por múltiples fuentes —entre ellas la agencia IRNA, Al Jazeera, CNN y Reuters—, no hay verificación independiente de que alguno de los proyectiles haya alcanzado la infraestructura militar estadounidense. Las autoridades qataríes mantienen restricciones aéreas y continúan evaluando la situación. La información aún está en desarrollo y se espera que en las próximas horas los gobiernos involucrados brinden actualizaciones oficiales.